El pasado 8 de noviembre, el Centro Oceanográfico de Málaga, en su nueva sede, recibió la visita de los alumnos de 4º curso del grado en Biología de la Universidad de Málaga (UMA), acompañados por la profesora Begoña Bautista Bueno. Durante su estancia, los estudiantes tuvieron la oportunidad de explorar nuestras modernas instalaciones y apreciar la colección de muestras y antiguos instrumentos expuestos en vitrinas, que narran la rica historia y trayectoria de nuestro centro de investigación.
Nuestra compañera Ana Mari mostrando a los alumnos de la UMA las instalaciones del laboratorio de biología molecular |
Para enriquecer la experiencia, algunos compañeros del Centro Oceanográfico ofrecieron breves charlas donde presentaron las diversas tareas que llevan a cabo los grupos de investigación asociados. Ana Mari y Jorge, integrantes de nuestro grupo, guiaron a los alumnos por los laboratorios de óptica y biología molecular. En el primero, presentaron instrumentos clave como el espectrofotómetro y el citómetro, fundamentales para la caracterización óptica de muestras. En el laboratorio de biología molecular, explicaron procesos como la extracción y análisis de ácidos nucleicos, esenciales en el estudio de la biodiversidad marina y la investigación genética.
Nuestro compañero Jorge mostrando a los alumnos de la UMA las instalaciones del laboratorio de técnicas ópticas. |
Esta visita fue más que una simple exploración académica. Los estudiantes pudieron vislumbrar posibles salidas profesionales en el ámbito de la investigación marina y evaluar opciones para desarrollar sus tesis de grado o máster, estableciendo un puente entre la academia y la práctica científica.
Ese mismo día, algunos de nuestros compañeros participaron en una jornada de divulgación científica en la biblioteca Cánovas del Castillo, enmarcada dentro de una feria de ciencias abierta al público. Durante esta actividad, se dio a conocer la labor del Instituto Español de Oceanografía (IEO) y, en particular, del Centro Oceanográfico de Málaga. Entre los atractivos exhibidos, destacaron ejemplares fascinantes como un embrión de delfín conservado con su cordón umbilical y un tiburón juvenil con una rara malformación que le generó dos cabezas.
Además, se preparó un experimento interactivo que despertó la curiosidad de grandes y pequeños. Utilizando colorantes alimenticios, se mostró la diferencia de salinidad entre aguas saladas y dulces, explicando la circulación oceanográfica en el estrecho de Gibraltar. Este sencillo, pero llamativo experimento permitió al público observar cómo las aguas saladas y densas permanecen en capas profundas, mientras las dulces flotan en las superiores, replicando el comportamiento de las aguas Atlánticas y Mediterráneas en el Mar de Alborán.
Equipo de divulgación del IEO para la feria de ciencias de la biblioteca Cánovas del Castillo, donde nuestro compañero Jorge participó a la derecha de la imagen. |
Estas iniciativas refuerzan nuestro compromiso con la divulgación científica y fomentan el interés por la investigación marina en nuestra comunidad. Mostrando la importancia de la labor que realiza el Instituto Español de Oceanografía a nivel nacional.
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